El cronograma electoral del 2021 se viene exigente. Como nunca antes, el país deberá renovar un importante número de autoridades en un período tan acotado de tiempo.
El nuevo año no sólo traerá consigo el abordaje simultáneo de una acentuada crisis sanitaria, de empleo y productividad, ya que con él se viene también un escenario cargado de procesos electorales. Lo cierto es que, como están las cosas, durante 2021 los ciudadanos del Maule tendrán que marcar once potenciales sufragios.
En efecto, habrá que elegir 30 alcaldes, 188 concejales, un gobernador regional (con una eventual segunda vuelta), 11 constituyentes, un Presidente de la República (también con un posible balotaje), 11 diputados y 20 consejeros regionales. Y a eso, se deben sumar además las eventuales primarias presidenciales y parlamentarias.
El país ya enfrentó el plebiscito de entrada al proceso constituyente, el cual anotó una cifra record en participación; y las primarias para gobernadores regionales y alcaldes, con una menor presencia de electores. Cifras más, números menos, lo cierto es que, en un escenario de pandemia, ambos comicios fueron sorteados de manera exitosa.
Ahora, sin duda, estamos frente a un calendario electoral sin precedentes, por lo que indudablemente se constituye en un reto para la ciudadanía, el gobierno y toda la institucionalidad que gira en torno a estos procesos.
La primera estación -el próximo del 11 de abril- contempla la elección de alcaldes, concejales, gobernadores regionales, y constituyentes, estos últimos serán parte de los 155 integrantes de la Convención Constitucional que redactará la nueva Carta Fundamental.
El director del Centro de Análisis Político (CAP) de la Universidad de Talca, Mauricio Morales, proyecta una cifra importante de postulantes, y a la vez un impacto negativo producto de la avalancha de datos que recibirán los electores.
“En la elección de 11 de abril, sumando los candidatos de alcaldes, gobernadores, concejales y convencionales, probablemente en el país tendremos entre 15 mil a 16 mil candidatos, con una tasa promedio de 100 candidatos por comuna, con ciertas variaciones, pero el shock de información que tendrá la gente será altísimo. Por lo tanto, habrá poco tiempo para hacer educación cívica y decir a la gente qué se vota en dichos comicios”, sostuvo.
SEGUNDAS VUELTAS Y PRIMARIAS
Para el 9 de mayo está fijada la segunda vuelta en las elecciones a gobernadores en las regiones que correspondan. El académico afirmó que, en este caso, rige un sistema de mayoría calificada. El candidato que llega al 40 por ciento de los votos válidamente emitidos y que obtenga la mayoría dentro de su región, será proclamado automáticamente.
“Si ninguno de los candidatos llega a dicho porcentaje, se procede a una segunda vuelta entre las dos mayorías”, detalló Morales.
El cronograma electoral continúa el 4 de julio, cuando se lleven a cabo las primarias presidenciales y parlamentarias. De aquí saldrán los candidatos que el 21 de noviembre serán parte de los comicios para elegir al Presidente de la República, senadores (no es el caso de la Región del Maule), diputados y consejeros regionales.
En caso de que ningún candidato presidencial alcance el 50 por ciento de los votos válidamente emitidos, se procederá a realizar la segunda vuelta, donde participarán los dos abanderados que alcancen la mayoría. Dicho referéndum se llevará cabo el 19 de diciembre, día en que se cerrará el extenso calendario electoral para el país del presente año.
Finalmente, y ya saltándose al año 2022, la “yapa” viene dentro del primer semestre (principios o fines del mes de junio), cuando se realice el plebiscito de salida, con el cual se ratificaría la propuesta de nueva Constitución Política de la República.
“El calendario es sumamente exigente. Nunca antes en Chile elegimos tantas autoridades en tan poco tiempo, lo que implica un desafío para el Servel, para los partidos políticos, para los ciudadanos, para los vocales de mesa y para el gobierno, en cuanto a garantizar un proceso limpio, abierto, transparente, informado, competitivo y con resultados claros y abiertos”, enfatizó el docente de la casa de estudios talquina.
Todo apunta a que el 2021 será un año crucial para el futuro de Chile.
Como principales hitos, la ciudadanía tendrá en sus manos la constitución de la primera asamblea constituyente de la historia y la elección de una nueva institucionalidad que regirá los destinos de cada una de las regiones.
Los partidos y el gobierno, en tanto, tienen desafíos que abordar de manera imperiosa. Fortalecer un sistema político debilitado, asegurar que son capaces de dar gobernabilidad y sobre todo reencantar a una ciudadanía cada vez más desconfiada.
La tarea no es menor, especialmente cuando a todos se les exige pensar el Chile del mañana. Acá no hay recetas mágicas, más que un esfuerzo conjunto, con participación, dialogo y propendiendo al bien común; y lejos de los cálculos egoístas. Así, sólo así, se podrá escribir con letras mayúsculas ese futuro que tanto se anhela.