¿Qué decisión adoptó la justicia?
Fue la tercera sala de la Corte de Apelaciones de Talca donde a petición de la fiscalía se resolvió confirmar la sentencia condenatoria al imputado, Gustavo Alejandro Yévenes Castro, quien fue sentenciado a la pena de cinco años y un día de cárcel por el Tribunal Oral de Talca, como autor del grave delito de robo con intimidación, delito que fue investigado y llevado a juicio por el Ministerio Público.
¿Y por qué llegó el caso a la Corte de Apelaciones?
Ocurre que la Defensoría Penal Pública presentó un recurso de nulidad ante la Corte de Apelaciones de Talca buscando dejar sin efecto el juicio y la condena. Dicha acción legal fue rechazada por el máximo tribunal regional, por estimar que no se configuraron las causales legales esgrimidas por la defensa del sentenciado.
¿Cuándo y dónde ocurrieron los hechos?
Según indica la sentencia del Tribunal Oral de Talca, los hechos ocurrieron en horas de la mañana del 14 de octubre del 2019, cuando la víctima se encontraba vendiendo lechugas en su camioneta, estacionada en calle 7 Norte con 18 Oriente, en las cercanías del Parque Industrial, en esta ciudad. Hasta allí acudió el imputado Yévenes Castro, quien utilizó un cuchillo que la víctima utilizaba para cortar zapallo, con el cual lo amenazó de muerte y le exigió la entrega del dinero reunido durante la jornada laboral. Pero la víctima no se dejó someter y pidió ayuda a su padre, quien se enfrentó con el imputado y resultó con su chaqueta con cortes, mientras el asaltante escapó del lugar. El imputado se ocultó en un domicilio cercano, donde fue detenido por personal de Carabineros.
¿Por qué se rechazó el recurso de nulidad de la defensa?
La Corte de Talca llegó a la conclusión que “la defensa centra su ataque a la sentencia de autos, más por no haber acogido la teoría del caso esgrimida por ella, que por haberse incurrido en un vicio al momento del pronunciarse la referida sentencia”.
“Basta leer detenidamente cada uno de esos raciocinios para darse cuenta del denodado esfuerzo de los falladores para sustentar cada una de las conclusiones a las que arribaron. Séptimo; Que el desacuerdo de la defensa con los argumentos vertidos por los jueces de la instancias constituyen discrepancias que de ordinario suelen darse con la dictación de un fallo contrario a los intereses de la parte que recurre”, añade.
“Que en este estado de situación, no resulta factible invalidar la sentencia del grado por contar con los fundamentos necesarios que respaldan cada una de las decisiones adoptadas en la parte resolutiva, de manera que el recurso de nulidad promovido por la defensa debe ser desestimado”, precisa la sentencia de la Corte de Talca.
¿Qué viene ahora?
En forma inmediata, la Corte de Apelaciones de Talca devolvió el expediente virtual al Tribunal Oral de Linares, donde se tendrá que decretar el “cúmplase” y reenviar la sentencia al Juzgado de Garantía de esta última ciudad, para que Gendarmería disponga el cumplimiento efectivo.
